Todo proceso psicológico se origina en el sistema nervioso, por eso es importante que los psicólogos entiendan cómo actúa este sistema, que está formado por dos subsistemas principales.
EL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL (SNC): Integrado por el cerebro y la médula espinal.
EL SISTEMA NERVIOSO PERIFÉRICO (SNP): Abarca a los nervios en conjunto, que transmiten información entre el sistema nervioso central y el resto del cuerpo. Está formado por dos sistemas: el sistema nervioso somático (SNS), responsable de las funciones de control voluntario (como movimiento, comer y hablar), y el sistema nervioso autónomo (SNA), responsable de aquellas funciones que no podemos controlar conscientemente (como la respiración, la digestión y la producción de hormonas). Una parte de las funciones del sistema nervioso autónomo es responsable de activarnos en momentos de estrés (por ejemplo, acelerando nuestro ritmo cardíaco o inhibiendo las funciones de los músculos de la digestión); es el llamado sistema nervioso simpático. Otras funciones están relaciones con las actividades diarias del cuerpo en reposo, como bajar el ritmo cardíaco o estimular los músculos de la digestión; se le conoce como el sistema nervioso parasimpático.
1. EL CEREBRO.
El cerebro, que procesa e interpreta toda la información enviada desde la médula espinal y el sistema nervioso periférico, consta de tres partes principales: el prosencéfalo, el mesencéfalo y el metencéfalo. El mesencéfalo y el metencéfalo juntos forman el tallo cerebral.
1.1. EL PROSENCÉFALO.
Esta zona es responsable de múltiples funciones entre las que se incluyen el lenguaje, el razonamiento, el procesamiento de la información y la función motora. El prosencéfalo contiene estructuras como el tálamo (que modera el sueño y la consciencia, entre otras cosas), el hipotálamo (que controla la alimentación, la ingesta de líquidos y el comportamiento sexual), la amígdala ( que procesa las emociones) y el hipocampo ( que juega un papel importante en elación con la memoria). En conjunto, estas estructuras forman el sistema límbico, al que a veces se le llama “cerebro emocional”.
El prosencéfalo también contiene la parte más grande del encéfalo llamada cerebro (también conocida como hemisferios cerebrales o corteza cerebral), que está plegada para poder tener una superficie mayor y que se divide en cuatro lóbulos, cada uno con diferentes funciones, como se muestra en la tabla:
LÓBULO DE LA CORTEZA CEREBRAL FUNCIÓN
Lóbulo frontal ( que contiene la corteza prefrontal) Razonamiento, planificación, partes de discurso, movimientos, emociones y resolución de problemas
Lóbulo parietal Movimiento, orientación, reconocimiento y percepción
Lóbulo occipital Procesamiento de la información visual
Lóbulo temporal Procesamiento de la información auditiva, memoria y discurso
1.2. EL MESENCÉFALO.
Es la parte del tallo cerebral que conecta el metencéfalo con el prosencéfalo. El mesencéfalo, la región más pequeña del cerebro, actúa como una especie de estación de retransmisión de información auditiva y visual. Contiene el sistema de activación reticular que es la región a través de la que prácticamente toda la información penetra en el cerebro.
1.3. EL METENCÉFALO.
El metencéfalo, una prolongación de la médula espinal, contiene estructuras como el cerebelo y el puente troncoencefálico. El cerebelo, que se relaciona con el movimiento, la postura y el equilibrio, es parecido al cerebro porque tiene dos hemisferios y tiene una superficie, o corteza, muy plegada. El puente troncoencefálico está formado parcialmente de tractos que conectan la médula espinal con niveles superiores del cerebro.
2. LA MÉDULA ESPINAL.
Se trata de un conjunto de nervios que bajan por el interior de la columna vertebral desde el tallo cerebral hasta el sistema nervioso periférico. La médula espinal está rodeada de un fluido claro llamado líquido cefalorraquídeo (LCR), que actúa como un cojín para proteger a los delicados nervios.
Los nervios de la médula espinal transmiten información del interior y exterior del cuerpo, a través de millones de fibras nerviosas, hasta el cerebro y viceversa. Los nervios que conectan la médula espinal con el cuerpo se conocen como el sistema nervioso periférico.
3. EL SISTEMA NERVIOSO.
Las unidades básicas del sistema nervioso son las neuronas o células nerviosas. Están formadas por axones y dendritas que son capaces de dirigir y transmitir señales: los axones transmiten señales hacia el exterior del cuerpo celular, mientras que las dendritas, que son más cortas que los axones, las transportan hacia el interior del cuerpo celular.
Las neuronas comunican y envían mensajes transmitiendo impulsos eléctricos nerviosos. Cuando esos impulsos eléctricos circulan entre las neuronas, no pueden saltar los espacios (sinapsis) que existen entre ellas. Entonces, las neuronas liberan sustancias químicas llamadas neurotransmisores para que no se corte la comunicación. Esos neurotransmisores están producidos por glándulas como la pituitaria o la suprarrenal. Pueden ser excitadores (excitan a las neuronas y estimulan el cerebro) o inhibidores ( producen un efecto calmante en el cerebro).
Existen tres tipos de neuronas: las neuronas motoras transmiten señales desde el sistema nervioso central (cerebro y médula espinal) a los órganos, las glándulas y los músculos; las neuronas sensoriales envían información al sistema nervioso central de los órganos internos y la causada por estímulos externos; y las interneuronas, por su parte, comunican información entre las neuronas motoras y las sensoriales.
(Dra Sandi Mann. La Biblia de la Psicología. Tú, este libro y la ciencia de la mente. Ediciones Gaia. Madrid. 2016)